2 lata de berberechos (unos 380 g con el líquido de conserva incluido…cuanto mejores sean…MEJOR)
160 g de espaguetis secos
2 cucharadas soperas de aceite de oliva
1 cucharada sopera de harina
2 cucharadas de perejil picado (o más, al gusto)
2 dientes de ajo
1 cayena (opcional)
Unas gotas de aceite de oliva virgen extra
2 cucharadas de vino blanco
Sal
Pimienta negra recién molida
Preparación:
Cocer la pasta en abundante agua hirviendo con sal, dos minutos menos de lo que dice el fabricante.
Mientras tanto, poner el aceite de oliva en la sartén y freír levemente los ajos muy triturados. Antes de que se quemen añadir la cucharada de harina y refreír un poco.
Añadir el liquido de las latas de berberechos y las dos cucharadas de vinos blanco y hacer con el ellos una salsa velouté.
Añadir los berberechos a la salsa y reservar
Cuando la pasta vaya a estar lista añadir el perejil , si se quiere, la cayena.
Incorporar los espaguetis. Lo ideal es sacarlos del agua directamente a la sartén, como se hace en Italia.
Menear bien, ya a fuego suave, para que la salsa se ligue bien y queden cremosos.
Añadir un poco más de perejil picado si se quiere y, en el último momento, con el fuego ya apagado un poco de sal y de pimienta negra . Mezclar bien y servir.
250 gr. de yogur de cabra (si no se encuentra, de vaca)
1 cebolla tierna
1 limón
1 manojo de menta fresca
1 cucharada de sumac (opcional)
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta negra recién molida
Preparación:
1. Cocer la patata con piel en agua hirviendo con sal durante unos 25 minutos, hasta que esté hecha. Dejar enfriar y pelar.
2. Pelar el pepino dejando un par de tiras de la piel a cada lado de la piel. Cortarlo en rodajas gruesas, salarlo y dejarlo escurriendo una media hora para que suelte líquido y suavice su sabor.
3. Triturar el pepino, la patata, el yogur, la cebolla tierna, el zumo de medio limón, el sumac si se tiene, unas 10 hojas de menta, 2 cucharadas de aceite de oliva, 2 cucharadas de agua fría, sal y pimienta. Si se ve muy espeso, añadir más agua hasta alcanzar la consistencia deseada. Dejar reposar en la nevera un mínimo de 3 horas (mejor de un día para otro).
4. Corregir de sal y servir muy frío con más menta picada fina, un chorrito de zumo de limón y otro de aceite de oliva.
Pela los ajos, lamina y fríelos (hasta que se doren) en una sartén con 2 cucharadas de aceite. Sazona las gambas y agrégalas. Saltéalas durante un minuto, retira y resérvalas.
Pon agua a calentar en un cazo, introduce los huevos y cuécelos durante 10 minutos. Retira, refresca y pélalos.
Córtalos por la mitad (a lo largo) y retírales las yemas.
Ponlas en un vaso batidor, añade 12 gambas con los ajos y las 3 cucharadas de mahonesa. Tritura los ingredientes con una batidora eléctrica. Rellena las claras con la mezcla.
Para hacer el guacamole (puedes utilizar un guacamole ya hecho…aunque no es lo mismo), corta la cebolleta por la mitad, quítale la primera capa, córtala en dados y ponla en el vaso batidor. Corta los aguacates por la mitad, con una cuchara retírales la pulpa, trocea y añádelos. Pela el tomate, córtalo en dados, escúrrelo un poco e incorpóralo. Vierte el zumo de ½ lima, sazona y tritura los ingredientes hasta conseguir una pasta homogénea. Pasa el guacamole a una manga pastelera y cubre los huevos rellenos. Pon el resto del guacamole en un bol y resérvalo.
Pincha las gambas restantes con un palillo e pincha los huevos con ellas.
Micro mézclum o germinando guisante al gusto para decorar (opcional)
Preparación:
Primeramente, picar las chalotas y rehogar con un toque de sal y mantequilla.
A continuación, asar los pimientos al horno y una vez cocinados, pelar.
Seguidamente, añadir los pimientos previamente picados a las chalotas y reservar.
El siguiente paso es limpiar las setas y saltearlas. Reservar y calentar paralelamente el fondo de pescado o verduras. En una cazuela añadimos la mantequilla, el vino blanco y el arroz carnaroli. Vamos añadiendo el fondo de verduras poco a poco a la mezcla.
Cuando pasen 10 minutos, añadir el sofrito de chalotas, pimientos, setas y la salsa tartufada para añadirle un toque de sabor único.
En el último minuto, añadir el queso previamente rallado y añadir un punto de sal y mantequilla. Seguidamente, pasar por la plancha las gambas limpias de tripa y piel y emplatar el arroz.
Como último paso, poner las piparras cortadas por encima y decorar con algún brote o germinado.
Picamos los puerros. Pelamos y cortamos una patata
Ponemos aceite en una olla. Doramos los puerros ligeramente. Agregamos la patata y cubrimos con agua. Dejamos cocinar hasta que las patatas estén tiernas.
Agregamos la leche evaporada y trituramos hasta conseguir la consistencia adecuada. Añadimos sal y pimienta.
Para los crujientes de bacon ponemos las lonchas en una bandeja de horno y lo doramos. Después los pasamos por un procesador hasta conseguir polvo de bacon.
Preparamos unas patatas paja con ayuda de una mandolina y las freímos en abundante aceite. Las reservamos sobre papel absorbente para retirar toda la grasa posible (se puede hacer con patatas paja de bolsa).
Emplatamos la crema y ponemos las patatas pajas y el polvo de bacon. Decoramos con un poco de cebollino por encima.
Preparar una cazuela grande y baja con agua y perejil. Exprimir el limón sobre el agua y dejarlo en ella.
Cortar el tallo de las alcachofas y quitar las hojas exteriores hasta llegar a las hojas de color amarillo. Importante: no tornear la base ni pelarla para eliminar la parte verde, porque entonces las hojas exteriores se desprenderán al abrirlas después.
Cortar la parte superior del cáliz e ir poniendo las alcachofas en la olla. Incorporar también los tallos, quitándoles la parte más dura del extremo.
Retirar el limón y poner la olla a calentar a fuego suave, sin dejar que el agua llegue a hervir. Cocer unos 35 minutos o hasta que las alcachofas estén tiernas (comprobar con un cuchillo). Dejarlas enfriar en la misma agua.
Sacar los tallos, que se pueden pelar y usar para otras preparaciones como una pasta, una ensalada o una tortilla.
Escurrir bien los corazones boca abajo en un colador, y luego secarlos con papel de cocina. Hasta aquí se puede hacer con antelación.
Abrir las hojas de las alcachofas con cuidado de no romperlas. Salpimentarlas y untarlas con un poco de aceite.
Calentar una sartén a fuego vivo. Poner las alcachofas en la sartén boca abajo para que se tuesten. Cuando estén doradas, darles la vuelta con cuidado y dejar que se hagan por el otro lado, añadiendo un poco más de aceite a la sartén si hace falta.
Machacar un poco de azafrán en un mortero y disolverlo con un poco de caldo para que dé color al arroz.
Juntarlo con el resto de caldo y ponerlo a calentar sin que llegue a hervir.
Doblar los espárragos hasta que se rompan. Cortarlos en trozos de unos 3 cm. Para aprovechar los trozos duros, cortar su parte verde en rodajas muy finas.
Rallar fino el Grana Padano.
Dorar la panceta cortada a tiras a fuego suave y retirarla cuando esté crujiente.
Pochar los ajos y la cebolla en la grasilla que ha soltado la panceta con una pizca de sal.
Añadir las rodajitas de espárrago y el arroz, y remover para que se impregne bien. Mojar con el vino, remover y dejar que se evapore un poco.
Añadir un chorro de caldo y remover. Cuando lo haya absorbido el arroz, repetir el proceso un par de veces a fuego medio-bajo sin dejar de remover.
Incorporar los espárragos (así quedarán al dente; si gustan muy hechos, se pueden poner antes en la cazuela, a la vez que el arroz). Seguir removiendo y añadiendo el caldo en pequeñas cantidades.
Cuando el arroz esté en su punto, apagar el fuego. Añadir la mantequilla y el Grana Padano y remover hasta que se fundan. Corregir de sal y, si ha quedado demasiado pastoso, añadir un poco más de caldo caliente y remover.
Servir al momento con los trozos de panceta por encima.
Pon abundante aceite a calentar en una sartén grande.
Pela las patatas, lava y córtalas en rodajas de 1/2 cm de grosor.
Sazona, rebózalas con harina y huevo batido, y fríelas (por los 2 lados) en una sartén con abundante aceite.
Retira y resérvalas sobre una fuente cubierta con papel absorbente de cocina.
En una cazuela amplia y baja pon dos a tres cucharadas del que ha quedado de rebozar las patatas y ponlo a calentar a fuego suave.
Pela los dientes de ajo, córtalos finamente y añádelos.
Corta la cebolleta en daditos e incorpórala. Rehoga las hortalizas durante 5-6 minutos (sin que se doren).
Agrega una cucharada de harina y rehógala un poco.
Vierte el vino, dale un hervor e incorpora el caldo y la guindilla.
Cuando empiece a hervir, añade las patatas y cocínalas en la salsa durante 15-20 minutos a fuego suave-medio.
Cuando las patatas estén a punto, incorpora las gulas a la tartera y tápala. Apaga el fuego y deja que reposen durante 3-4 minutos.
Sirve las patatas con las gulas en 4 platos, salsea, espolvoréalos con un poco de perejil picado
Consejo:
Lo importante de este plato es comerlo bien caliente y recién hecho, por lo que os recomiendo que sentéis a vuestros comensales a la mesa y que sean ellos los que esperen.
Pon la mantequilla en un cuenco. Mételo en el microondas a máxima potencia durante 20 segundos.
Añade el huevo y el azúcar y bate enérgicamente.
Incorpora la nata y remueve.
Echa la harina, la levadura y el cacao, y mezcla bien.
Trocea 4 galletas Oreo®, incorpóralas y remueve de nuevo.
Mete la taza en el microondas a 800 W de potencia durante 1 minuto. Saca del microondas y pon una galleta partida en dos por encima, introduciendo las mitades un poco en la masa.
Termina de cocer a la misma potencia durante 40 segundos más.
Consejos
Puedes cambiar este tipo de galleta por la que más te guste. Está muy rico también con galletas rellenas de crema de cacao.